El recorte realizado por la federación en los recursos que asignó para San Luis Potosí para el ejercicio 2024 por al menos 2 mil 500 millones de pesos, tendrá como una consecuencia una presión en la deuda pública contingente, reflejada en los compromisos de pago con proveedores, pero también el que varios proyectos de infraestructura resientan un marcado desfase; algunos podrán ejecutarse hasta el año 2025, explicó el mandatario estatal Ricardo Gallardo.
Sin embargo, comentó, el gobierno no resentirá problemas en el desarrollo o cumplimiento de programas sociales.
Explicó que esos 2 mil 500 millones de pesos, cancelados en la asignación presupuestal del actual ejercicio fiscal, son irrecuperables, ni siquiera en reasignaciones hacia el 2025.
Ese recorte se traduce en un déficit para las finanzas públicas estatales, porque deberá enfrentar todos aquellos compromisos de pago.
Gallardo explicó que un componente afectado con severidad es en el desarrollo de obra pública, al menos mil 500 MDP de la cantidad perdida, estaban presupuestados para proyectos de infraestructura nuevos.
Dijo que el recorte provocó un desfase en el desarrollo de obra, por lo que podrá reanudarse de nueva cuenta, pero avanzado el próximo año, y no en los primeros meses, como era el ritmo habitual.
Ocurrirá hasta que la Federación comience la transferencia de los recursos presupuestados.
Conforme a los calendarios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, es en la última semana de cada mes cuando son realizadas las transferencias a entidades federativas.
Apuntó que además se tendrá como una presión el compromiso de pago a proveedores de la administración gubernamental, a quienes se les cubrirán sus facturas a lo largo del próximo año.
Gallardo admitió que es un panorama complicado el que se enfrenta hacia el 2025, con limitaciones en los recursos presupuestales, por los recortes que decidió el gobierno federal.
Dijo que pese a esa disminución que genera presión al gasto corriente y que desfasa el desarrollo de obra pública, no son afectados otros renglones ni la operatividad de la administración a su cargo.
Añadió que, por ejemplo, se logra reducir de nueva cuenta, el monto de la deuda pública bancaria de largo plazo, al acumular al cierre de 2024, poco más de 3 mil 200 millones de pesos.
Gallardo descartó la contratación de nueva deuda bancaria de largo plazo, y expuso que solo se ha recurrido a créditos quirografarios. La semana pasada fueron solicitados dos más, por poco más de mil 500 millones de pesos, para hacer frente a los compromisos de pago de fin de año.
Afirmó que para 2025 reforzarán la capacidad recaudatoria de las finanzas estatales para mantener el ritmo de crecimiento adecuado.
