El CEO de Ford Motor, Jim Farley, advirtió que los aranceles propuestos e implementados por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, han generado “un montón de costos y un montón de caos” en la industria automotriz, aunque reconoció que la intención del mandatario es fortalecer la producción e innovación en el país.
Durante una conferencia con analistas este martes, ejecutivos de la compañía señalaron que Ford está explorando opciones para acumular inventario en preparación para la posible imposición de un arancel del 25% sobre las importaciones de México y Canadá. Aunque Trump tenía previsto iniciar la medida a principios de febrero, su aplicación fue pospuesta hasta marzo.
IMPACTO EN MATERIALES Y SUMINISTROS
A pesar de la reciente imposición de aranceles al acero y aluminio, Ford no se encuentra entre las empresas más afectadas, ya que la mayor parte de estos materiales provienen de fuentes nacionales, indicaron sus directivos. Sin embargo, la compañía anticipa un aumento en los costos derivados del impacto que sufrirán sus proveedores.
Farley destacó la visión del presidente Trump de fortalecer la industria automotriz estadounidense y atraer mayor producción al país. Sin embargo, advirtió que, hasta ahora, las políticas comerciales han traído consigo más incertidumbre que beneficios.
“El presidente Trump ha hablado mucho de hacer que nuestra industria automotriz sea más fuerte, de traer más producción aquí y más innovación a Estados Unidos. Si este gobierno puede lograr eso, sería uno de sus logros más emblemáticos. Hasta ahora, lo que estamos viendo es mucho costo y mucho caos”, expresó el CEO de Ford.
La incertidumbre generada por la posible implementación de los aranceles ha puesto en alerta a la industria automotriz, que depende en gran medida de cadenas de suministro integradas entre Estados Unidos, México y Canadá. Ford, al igual que otros fabricantes, analiza estrategias para minimizar el impacto en su producción y costos operativos.