CIUDAD DE MÉXICO.— El Pleno de la Cámara de Diputados aprobó este martes una reforma a la Ley Federal del Trabajo que garantiza el derecho de los trabajadores que perciben ingresos mediante propinas a recibir un salario fijo, el cual no podrá ser sustituido ni compensado con gratificaciones voluntarias.
La iniciativa, impulsada por el legislador morenista Pedro Haces, fue respaldada por unanimidad con 446 votos. La reforma establece que todos los trabajadores deberán recibir una remuneración no menor al salario mínimo general o profesional, y será aplicable en sectores como el deportivo, el de entretenimiento, estaciones de servicio de combustible y establecimientos similares.
PROPINA COMO COMPLEMENTO, NO COMO SUSTITUTO
El dictamen aprobado define las propinas como una “gratificación solidaria” otorgada por la calidad en el servicio, cuya distribución será responsabilidad de los propios trabajadores, prohibiendo a los patrones apropiarse de ellas o usarlas como parte del sueldo.
Aunque Haces negó que el proyecto original contemplara imponer un gravamen a las propinas, el vicecoordinador del PRI, Erubiel Alonso, aseguró que en un principio sí se proponía recaudar más de 10 mil millones de pesos mediante este mecanismo. Fue durante la discusión en comisiones donde se logró un acuerdo para revertir ese planteamiento.
“Ahora más que nunca, el salario será libre y no incluirá propinas”, enfatizó Alonso, al destacar que esta reforma busca formalizar a millones de trabajadores que hasta ahora han estado excluidos de derechos básicos.
ACUERDO PARA NO GRAVAR Y ASEGURAR EQUIDAD EN DISTRIBUCIÓN
El Pleno también aprobó dos reservas. Una de ellas, promovida por el panista Marcelo Torres Cofiño, aclara que las propinas forman parte del ingreso de los trabajadores, sin que deban integrarse al cálculo de las cuotas de seguridad social.
“Esta precisión es clave para dar certeza a trabajadores y empleadores, evitando cargas adicionales”, explicó Torres Cofiño. El legislador también propuso que la distribución de las propinas se base en el tiempo laborado y la actividad desempeñada, buscando asegurar equidad.
Asimismo, se incluyó un nuevo apartado que faculta a los inspectores laborales a intervenir en caso de conflictos sobre la repartición de propinas, estableciendo mecanismos de conciliación y vigilancia.
UN PASO HACIA LA FORMALIDAD LABORAL
Al presentar el dictamen, Pedro Haces señaló que esta reforma beneficiará a alrededor de 1.7 millones de personas cuyos ingresos dependen de comisiones, propinas o pagos a destajo. De acuerdo con cifras del segundo trimestre de 2024, 67.4 por ciento de los meseros y anfitriones laboraban en la informalidad.
En sectores como el restaurantero, de alojamiento y servicios de esparcimiento, alrededor de 80 mil personas carecen de salario fijo, según el legislador. “Esta es la situación laboral que vamos a cambiar. El esfuerzo de los trabajadores se reconocerá con dignidad y derechos”, afirmó.
Haces subrayó que la reforma no sólo garantiza el salario, sino que permite el acceso a prestaciones laborales como salud, vivienda y pensión. Hizo un llamado a no desaprovechar la oportunidad de conmemorar el Día del Trabajo con esta medida.
El dictamen fue turnado al Senado para su discusión y eventual aprobación.