El Impuesto sobre Emanaciones Contaminantes, en la forma en la que quedó definido al final, para comenzar su tributación en 2025, no es una versión descafeinada de la original. Sonia Mendoza, titular de la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental, sostuvo que, por el contrario, demuestra la apertura y conciliación del gobierno estatal hacia los sectores productivos.
El ISEC, contenido en el capítulo de Impuestos Ecológicos, comenzó a enterarse desde el 1 de enero.
Las reglas de operación difundidas al cierre del año por la Secretaría de Finanzas, sin embargo, concedieron estímulos hasta de 100 por ciento en varios supuestos para las empresas, como es la apertura de nuevas unidades o, en otros casos, con una determinada generación de CO2, será menor a tres UMAs el monto de la contribución.
Mendoza negó que se trate de la versión descafeinada del impuesto. Durante un año, en 2024, dijo que se trabajó con organismos empresariales y sectores productivos en una propuesta definitiva del ISEC y de sus reglas de operación.
La forma de su aplicación final, aseguró, es el resultado de una conciliación eficaz, aceptada por esos sectores.
La funcionaria gubernamental explicó que es la SEFIN la que generó las reglas de operación e incentivos, mientras que a la SEGAM corresponde solo la parte normativa.
Los recursos que serán captados a través del ISEC, añadió, serán administrados por la SEFIN conforme a los planes y proyectos de la administración gubernamental.
