El programa "Jóvenes Construyendo el Futuro", creado por el expresidente Andrés Manuel López Obrador y ampliado por la administración de Claudia Sheinbaum Pardo, continúa siendo una herramienta clave para la integración de jóvenes al mercado laboral. Este esquema ofrece capacitación pagada por un año a personas de entre 18 y 29 años que no estudian ni trabajan, con un presupuesto nacional de 24 mil 205 millones de pesos para 2025.
En San Luis Potosí, el delegado del Bienestar, Guillermo Morales López, anunció que en enero se incorporarán 6,000 nuevos beneficiarios, quienes recibirán una beca equivalente a un salario mínimo, que en 2025 será de 8,278.80 pesos mensuales. Aunque las fechas de vinculación estaban programadas del 1 al 15 de diciembre, Morales López destacó que la alta demanda ha acelerado el cumplimiento de la meta. El programa acepta participantes en giros industriales, comerciales, artísticos, oficios y en instituciones públicas.
OPINIONES DEL SECTOR EMPRESARIAL
El programa ha sido bien recibido por empresarios potosinos, quienes reconocen su utilidad para brindar experiencia laboral a los jóvenes. Sin embargo, han señalado áreas perfectibles, como el proceso de vinculación y la transparencia en la ejecución del programa. Alejandro Espinosa Abaroa, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), afirmó que el proceso de vinculación presenta dificultades, incluyendo la desvinculación de aprendices sin explicaciones claras.
"Falta claridad en el programa. No son claras las reglas ni hay seguimiento a los casos. En el gremio hemos enfrentado situaciones donde desvinculan a los aprendices sin explicaciones, pese a que cumplimos con los lineamientos", señaló.
Espinosa también sugirió enfocar el programa por áreas para que los jóvenes obtengan una especialización que les permita maximizar los beneficios de su capacitación.
Por su parte, Jaime Chalita Zarur, expresidente de Coparmex en San Luis Potosí, destacó que el programa ha permitido que muchos jóvenes sean contratados formalmente después de concluir su participación. "Es una herramienta útil que enseña a los jóvenes la realidad del trabajo en las empresas. Aunque tiene áreas perfectibles, es pertinente que programas como este sigan existiendo junto a otros que respondan a las necesidades de productividad del país", afirmó.
Alberto Narváez Arochi, empresario potosino, subrayó que "debemos enfocarnos en la educación y garantizar la transparencia en los programas sociales".