El próximo debate presidencial entre Donald Trump y Kamala Harris promete ser un evento crucial en la carrera hacia las elecciones del 5 de noviembre. Harris asume la candidatura demócrata en reemplazo de Joe Biden, quien decidió abandonar la contienda debido a la baja en las encuestas y las críticas que recibió tras su desempeño en el primer debate.
Este será el primer enfrentamiento directo entre ambos candidatos. Harris planea usar el debate para atraer a votantes indecisos, mientras que la campaña de Trump intentará responsabilizarla de las políticas de la administración actual, como la inmigración y la retirada de Afganistán.
Aunque los temas del debate no se revelarán hasta el evento, es probable que se toquen asuntos como la economía, la política exterior (particularmente la guerra entre Israel y Hamas), el aborto y la crisis migratoria en la frontera con México. Será una oportunidad clave para ambos candidatos de exponer sus plataformas y dirigirse a un electorado polarizado.