Los ingresos petroleros han sido fundamentales para las finanzas públicas en México, sin embargo, su relevancia ha disminuido debido a la caída en la producción, los precios del petróleo y la reducción del Derecho de Utilidad Compartida (DUC). Este declive ha afectado especialmente a entidades petroleras como Campeche, Tabasco, Tamaulipas y Veracruz, cuyas finanzas públicas dependen, en parte, de estos recursos.
En el documento “Retos fiscales de la transición energética. Cambio de los ingresos petroleros en las entidades federativas”, el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) analizó el impacto del cambio de los ingresos petroleros en las finanzas públicas de los estados mencionados.
El CIEP refiere que, debido a que el 80.3% de los ingresos petroleros se integran a la Recaudación Federal Participable (RFP), entre 2015 y 2023, Campeche y Tabasco experimentaron caídas en sus ingresos provenientes de los fondos de las Participaciones del 12.5% y 3.9%, respectivamente. Periodo en el que los ingresos petroleros pasaron de representar el 2.2% al 1.1% del PIB. Además, los recursos del Fondo de Extracción de Hidrocarburos disminuyeron en más del 50% en todas las entidades analizadas.
Caso contrario, Tamaulipas y Veracruz muestran de manera agregada un incremento en sus ingresos de 11.3 % y 19.3 %, debido a un aumento en el Fondo de Fomento Municipal, el cual depende de la recaudación local, lo que les ha permitido mitigar los efectos de la disminución de los ingresos petroleros.
La disminución de los ingresos petroleros ha tenido un efecto negativo directo en el Fondo de Extracción de Hidrocarburos de las cuatro entidades petroleras. En particular, Campeche enfrenta una reducción del 48.6%, Tabasco del 51.7%, Tamaulipas del 69.4% y Veracruz del 56.8%.
El avance acelerado de la transición energética, podría generar un impacto en la sostenibilidad fiscal local de estos estados y municipios por lo que elevar la recaudación local es fundamental para reducir la dependencia hacia los recursos petroleros.
Una alternativa podría ser el fortalecimiento de la recaudación de impuestos verdes, pues estos representan en promedio el 3.5 % de la recaudación tributaria y apenas el 0.27% de los ingresos totales a nivel subnacional en los estados que los implementan.