La Secretaría de Hacienda se prepara para cambios significativos con la salida de Gabriel Yorio, subsecretario de Hacienda, quien dejará su puesto el próximo lunes, coincidiendo con el último día de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Yorio, quien ha sido el brazo derecho de Rogelio Ramírez de la O, actual y próximo secretario de Hacienda, no tiene planes de asumir un nuevo cargo público en la próxima administración; sus opciones laborales parecen dirigirse hacia el extranjero, aunque aún no ha tomado una decisión definitiva. A sus 48 años, Yorio se unió a la dependencia federal al inicio del sexenio, formando parte del equipo del entonces secretario Carlos Urzúa, donde lideró la Unidad de Crédito Público.
La presidenta electa, Claudia Sheinbaum, confirmó la renuncia de Yorio, destacando que “él quiere ocupar un espacio internacional, es una decisión de él”. Esta noticia surge en un contexto de transición sexenal, a pocos días de que Sheinbaum asuma la presidencia, y en un momento de ratificación para Ramírez de la O.
Durante su tiempo en el Gobierno, Yorio se consolidó como una figura clave en la Secretaría de Hacienda, actuando como el principal interlocutor con inversionistas y banqueros. A pesar del rompimiento entre Urzúa y López Obrador en 2019, Yorio continuó en su puesto hasta el final de la administración.
En el ámbito internacional, Yorio ha tenido una carrera destacada, siendo especialista en el Banco Mundial desde 2013, donde participó en más de 20 proyectos para mejorar el sector público en 12 países. Además, ha trabajado en el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos y en la Secretaría de Finanzas de la Ciudad de México. Originario de Papantla, Veracruz, es licenciado en Economía por el Tecnológico de Monterrey y posee dos maestrías: una en Economía por el Colegio de México y otra en Gestión de Políticas Públicas por la Universidad de Georgetown.
