El empate 0-0 entre México y Canadá dejó en evidencia que la Selección Mexicana aún no logra adaptarse completamente al estilo que Javier Aguirre busca implementar de cara al Mundial de 2026. A pesar de la intensidad y el esfuerzo físico mostrados, el equipo careció de creatividad y fluidez en su juego, lo que llevó a un partido carente de emociones y oportunidades claras.
México se mostró seguro en la línea defensiva, con jugadores como Luis Ángel Malagón, Víctor Guzmán y Johan Vásquez respondiendo bien cuando fueron exigidos. Sin embargo, a nivel ofensivo, el equipo no pudo generar peligro constante, y figuras como Santiago Giménez fueron neutralizadas por la defensa canadiense.
El mediocampo fue un área de lucha constante, pero ninguno de los equipos logró imponer su estilo. Jugadores como Érik Lira y Luis Romo intentaron controlar el balón, pero sin éxito. La velocidad de Chino Huerta fue uno de los pocos aspectos positivos en ataque, aunque no logró capitalizar sus incursiones.
Aguirre intentó cambiar el rumbo del partido con los ingresos de jugadores como Jorge Sánchez, Charly Rodríguez, Henry Martín y Diego Lainez, pero los cambios no generaron el impacto esperado. Un disparo de Roberto "Piojo" Alvarado fue una de las pocas ocasiones peligrosas.
El partido, disputado en Arlington, Texas, no logró entusiasmar al público presente, quienes comenzaron a mostrar su desinterés ante el ritmo lento y la falta de emoción. Los resultados recientes de la selección mexicana han generado descontento entre los aficionados, y este empate no ayudó a mejorar la situación.
En resumen, México mostró lucha y entrega, pero todavía falta claridad en su juego para poder cumplir con las expectativas de cara a su preparación para la Copa del Mundo de 2026.
