Ahorrar dinero en servicios es una de las cosas que la gente desea cada mes. Y es que si juntamos la luz, el agua, el internet, en algunos casos mantenimiento y el gas, los gastos son muchos.
Y cuando llega el invierno, debemos agregar un gasto extra: la calefacción. Pero puede que el recibo de luz o gas suba demasiado en esta época, por lo que queda la duda de si vale la pena tenerla encendida todo el día o solo por ratos.
La calefacción es una de las principales consumidoras de energía de los hogares, sobre todo en aquellos lugares con climas extremos. Por ello, lo ideal es hacer un balance de lo que se consume y encender de forma inteligente los dispositivos.
> Ajusta la temperatura: esto no quiere decir que dejes todo el día prendida la calefacción, es mejor solo utilizar lo que necesites y a la temperatura que requiera tu cuarto.
> Selecciona bien tus cuartos: para ahorrar hay que ser inteligente y entender que no sirve de nada tener la calefacción encendida en cuartos que no visitas. Lo ideal es utilizarla en la habitación donde más pasas el tiempo, por ejemplo, la sala de estar.
