Un grupo de trabajadores del Hospital General de Rioverde demandaron la inmediata destitución de la directora general del nosocomio y de la administradora, Edith Reynaga Hernández y Lucia Esmeralda Rico Padrón, respectivamente, ante las graves complicaciones operativas que se han registrado en los últimos meses y que, aseguraron, se han traducido en un grave problema para garantizar un servicio de calidad a favor de la ciudadanía.
“La situación es tan insostenible que más del 70 por ciento de los puestos de jefes de servicio están vacantes, debido a la renuncia del personal gestor ante las decisiones poco razonables y sustentadas de la cabeza hospitalaria, además que, al ocurrir algún evento desfavorable por su indicación, la directora de la institución se deslinda de la responsabilidad, negando que ella haya dado la indicación, puesto que no realiza oficios ni los firma, sólo son indicaciones verbales” precisaron los quejosos.
Explicaron que, además de una pésima conducción, existe un desabasto generalizado de insumos y medicamentos, además de que, por la falta de personal, no es posible proporcionar una atención adecuada a la ciudadanía que, en muchas ocasiones se ve obligada a trasladarse a otros municipios, sobre todo a la capital para recibir el servicio que necesitan, lo que les conlleva gastos importantes y, lamentablemente, no todos tienen los recursos para costearlos.