En el marco de las investigaciones por el asesinato de Jesús Eduardo Franco Lárraga, alcalde de Tancanhuitz, ocurrido el pasado 15 de diciembre, la Fiscalía General del Estado incautó este martes un arsenal de alto calibre y un leopardo en un rancho propiedad de José Guadalupe Aguilar Acuña, exalcalde del municipio.
Aguilar Acuña, quien también ocupó la Presidencia Municipal, se encuentra prófugo junto a su hijo, Alejandro Aguilar Martell, regidor morenista en el Cabildo de Tancanhuitz. Las autoridades presumen que ambos podrían estar implicados en el asesinato de Franco Lárraga y sus tres colaboradores: su secretario particular, Santiago Villalobos, y sus escoltas Jesús Cipriano y Jesús Alan Díaz.
LA ORDEN DE CATEO Y EL HALLAZGO
El operativo se llevó a cabo en el domicilio de Aguilar Acuña, ubicado en la calle Gonzalo N. Santos, en el centro de la cabecera municipal. La orden de revisión fue emitida por un juez de control ante las sospechas de que el exalcalde podría estar relacionado con el delito de homicidio calificado.
Durante el cateo, las autoridades recuperaron evidencias que podrían estar directamente vinculadas con el asesinato del edil morenista. Entre los elementos incautados destacaron varias armas de alto calibre, cuyo uso está restringido al Ejército, y un leopardo, cuyo origen y función en el rancho serán materia de investigación.
DETENCIÓN DE MANUEL AGUILAR ACUÑA
Este cateo se suma a la reciente detención de Manuel Aguilar Acuña, hermano del exalcalde prófugo y también exedil de Tancanhuitz, quien ocupó el cargo bajo el Partido Acción Nacional. Manuel Aguilar está señalado por la Fiscalía como autor material del asesinato de Franco Lárraga y sus tres colaboradores.
Por su parte, las autoridades buscan también a Alejandro Aguilar Martell, sobrino de Manuel Aguilar y actual regidor de Morena, quien permanece ilocalizable desde el día del crimen.
EL CRIMEN EN LA CARRETERA
El asesinato de Jesús Eduardo Franco Lárraga y sus acompañantes ocurrió el pasado domingo 15 de diciembre, cuando transitaban a bordo de un vehículo particular por la carretera México-Laredo. El ataque, perpetrado con armas de fuego, se suma a la creciente violencia política que afecta a diversos municipios de la región Huasteca.
Las autoridades continúan las investigaciones para esclarecer el caso, en un contexto marcado por el choque de intereses políticos y las disputas por el control territorial en San Luis Potosí.
