Con la mira puesta en evitar ese cuantioso desperdicio del vital líquido, que ocurre por las pésimas condiciones en ambas redes, el programa mencionado ha enfocado sus esfuerzos desde que arrancó, en reparar la red de drenaje empezando por zonas estratégicas y dañadas de la ciudad como son las colonias de la ciudad y las ubicadas por los rumbos de la Fenapo, con lo que el organismo operador dispondrá de la suficiente cantidad de agua para satisfacer la demanda con lo que, de paso, podrá elevar sus ingresos por el cobro de las cuotas por el consumo, con lo que podría resolver los problemas de reparación de los pozos y de su parque vehicular, lo que no ha podido realizar por el desastre económico en que dejó la administración de Fermín Purata al Interapas.
Por ejemplo, aunque no lo quieran reconocer públicamente los más altos funcionarios actuales del organismo, ya sea porque no es políticamente correcto o por la afectación de las relaciones del alcalde con fuertes grupos empresariales, esta columna pudo enterarse de que varios de los lujosos fraccionamientos residenciales del poniente de la ciudad no pagan ni un peso por consumo de agua, pago del que también en el pasado se exentó a casi todos los clubes sociales y deportivos ubicados en esa zona, a los que se agregan varios de los grandes hoteles de la ciudad a los que tampoco se les cobra por el vital líquido, que en el pasado fueron privilegiados por gobernantes estatales o municipales.
Asimismo cualquier persona que haya podido echar un breve vistazo a las empresas de la zona industrial podrá tener una idea a grandes rasgos del colosal volumen del líquido que consumen, por el que tampoco pagan una cuota mínima al organismo, hecho que se atribuye a concesiones otorgadas por gobiernos estatales y municipales anteriores, con el fin de congraciarse con el sector industrial que se distingue como el más crítico de las acciones gubernamentales y el más exigente en lo que se refiere a la prestación de los servicios públicos. De cumplir con la cobertura de sus cuotas, como todo ciudadano, podrían ayudar con mucho a que el organismo cuente con los recursos suficientes para proporcionarlo eficientemente, lo que podría lograrse si se crea conciencia de cumplir con su deber de pagar el agua que consumen, Ahora, si no lo hacen, pues como que ya es tiempo de apretarles legalmente las tuercas para que cumplan con esa obligación en virtud de que: “ o todos coludos o todos rabones”, ¿no? Ya disfrutaron muchos años del privilegio de no pagar, lo mismo que los grandes constructores de lujosos fraccionamientos situación de la que ya están bien enterados en las oficinas principales de la UAM y en los despachos ejecutivos del Interapas.
ALPISTEANDO
En la Facultad de Contaduría y Administración reiniciaron clases cinco mil estudiantes, quienes se encontraron con la novedad de que no hay agua por lo que los baños han estado cerrados y solo el edificio donde despacha la directora, Hilda Lorena Borjas, cuenta con suministro y no se ve que la administradora, María Concepción Mascorro, haga algo por resolver este problema y otros que aquejan a la institución. Bien haría el rector de la UASLP, Alejandro Zermeño, en darse una vuelta por la facultad para ver cómo andan las cosas, que están de cabeza... El gobernador agregó otro logro a su administración con la federalización de los servicios de salud y la atención universal que ofrecerán las instituciones, lo que ni el profesor Carlos Jonguitud Barrios pudo conseguir para SLP con todo el poder político que tenía.