La "Hora de la Tierra" nació hace 11 años en Sydney, en Australia, como un gesto simbólico para llamar la atención sobre el problema del cambio climático. Una década después, miles de ciudades de 187 países del mundo apagan este sábado más de 12,000 monumentos y edificios icónicos a las 8:30 p.m. hora local para promover la reflexión sobre los problemas ambientales del planeta.