A pesar de la proliferación de panfletos digitales que ahora invaden internet y las redes sociales, los medios de comunicación tradicionales se mantienen como la alternativa más viable para ofrecer información sobre la cotidianidad de una sociedad. Sin embargo, ahora también se exige una corresponsabilidad de los lectores, afirmó el caricaturista Alfredo Narváez, conocido como “Pingo”.
Narváez explicó que tanto los lectores como los medios formales deben tener la capacidad de analizar y verificar la información antes de proceder a su publicación.
Expuso que, en su mayoría, los llamados panfletos digitales contienen un 90 por ciento de información falsa.
Añadió que internet y motores de búsqueda como Google, el más común, son herramientas de la modernidad a las que la mayoría de las personas tienen acceso.
Estas herramientas deberían utilizarse para comprobar si la información es correcta o no, lo que supone un ejercicio de responsabilidad.
“Es una corresponsabilidad de los lectores”, dijo, “para evitar caer en esos casos en los que cualquier información, solo porque se tuvo acceso a ella, se comparte de inmediato sin verificar. Eso se convierte en un vicio muy frecuente y que, como consecuencia, solo genera más desinformación”.
“Pingo” no cree que, a pesar de su proliferación, los panfletos digitales le ganen espacio o influencia a los medios tradicionales, ni que hayan arrebatado segmentos de público o audiencias. Esto se debe a que carecen de la capacidad de respaldar sus contenidos con un ejercicio periodístico.
El caricaturista coincidió en que hay un exceso en el manejo de la noticia en su modo opinativo.
Eso muchas veces resta calidad al manejo informativo y restringe las posibilidades de realizar trabajos de investigación elaborados o más documentados, sin depender solo de una voz declarante.
Citó a David Remnick, director de The New Yorker: “¿La montaña de basura de internet puede ser la alternativa a los medios tradicionales? No lo creo”.
